Con la creciente adopción de las nuevas tecnologías en el país, cada vez son más los individuos que deciden incursionar en el ecosistema cripto, prueba de ello Colombia es el segundo país en el Índice de Adopción de Criptomonedas 2022 de Chainalysis. Sin embargo, a medida que crecen los usuarios de las criptodivisas a una velocidad acelerada, también incrementa las incertidumbres y mitos que son importantes desmitificar para utilizar estas herramientas de la manera correcta.
Ahora que los gobiernos y las instituciones financieras se plantean cómo regular e integrar las criptomonedas en el sistema financiero mundial, es especialmente importante dejar las cosas claras. Aunque sin duda existen riesgos y preocupaciones válidas, la tecnología blockchain tiene un enorme potencial para democratizar las finanzas, aumentar la transparencia económica, reducir los costes de hacer negocios y estimular la innovación. Es por ello que a continuación desmentimos 4 mitos de las criptomonedas.
Las cripto sólo las utilizan los delincuentes
En los inicios de las criptomonedas, los delincuentes identificaron una oportunidad para estafar y dañar a miles de usuarios en todo el mundo ante la falta de regulaciones en un sector que apenas estaba emergiendo y del que no muchos tenían amplio conocimiento. Tal fue el caso de Silk Road, el primer mercado moderno de la darknet, que en su punto álgido representó casi el 20% de la actividad económica diaria de Bitcoin antes de ser cerrado por las fuerzas de seguridad en 2013.
En la última década, el aumento de la presión policial y la regulación de las criptomonedas han ayudado a reducir los delitos relacionados con las criptomonedas, mientras que las herramientas de análisis de blockchain también han facilitado la investigación y la prevención de actividades ilícitas.
Las criptomonedas carecen por completo de regulación
Esta falta de regulación en los inicios de las criptomonedas abrió todo un abanico de posibilidades que permitía a cualquiera hacer un mal uso de ellas. Fue entonces que los gobiernos y organismos financieros se dieron cuenta de la necesidad de regular un sector que tenía el potencial de revolucionar por completo las transacciones económicas a nivel mundial.
En 2019, el Intergovernmental Financial Action Task Force (FATF) publicó normas globales detalladas para combatir las finanzas ilícitas entre sus muchos países participantes, y esas normas se han actualizado periódicamente desde entonces. A raíz de esto cada país trató de adoptar las normas globales y las tradujo a sus normas locales.
Las cripto son anónimas e imposibles de rastrear
Las transacciones de criptomonedas siempre han sido seudónimas, en el sentido de que están vinculadas a una dirección estática y visible públicamente, y no anónimas, como muchos creen. La ampliación de las obligaciones KYC (Conozca a su cliente) a las empresas de criptomoneda también garantiza que otras transacciones, como las conversiones de moneda fiduciaria en criptomoneda, tampoco sean anónimas.
“Lejos de ser anónima, la blockchain ha producido el sistema financiero más transparente y democratizado que el mundo ha visto hasta ahora, con todas las transacciones registradas en un libro de contabilidad público”, dijo Dan Cartolin, Ejecutivo de Cuenta para Norteamérica y América Latina en Chainalisys “Sin embargo, para supervisar eficazmente la actividad o localizar a los delincuentes, es importante contar con las herramientas adecuadas, y ahí es donde entran en juego las plataformas de análisis de blockchain.”, puntualizó Cartolin.
Las plataformas para invertir en criptomonedas roban a sus usuarios
Tener que operar plataformas de reconocida reputación, que ofrezcan garantías y buen soporte. De esa manera es seguro invertir en Bitcoin y demás criptomonedas. Puede que algún día las criptomonedas reemplacen el efectivo y las tarjetas de crédito, pero por ahora, se considera que todas las monedas digitales existentes solo valen un pequeño porcentaje del dinero físico del mundo. A lo que se puede apuntar es a invertir en Bitcoin como una forma de diversificación o para generar plusvalía tanto a largo como a corto plazo.
Está claro que las criptomonedas llegaron al mercado para quedarse y 15 años después de su nacimiento seguimos aprendiendo cómo usarlas de forma segura, eficiente y útil. Hay muchos mitos y desinformación al respecto, pero las criptodivisas cada vez se integran más a la economía de los países. Actualmente los gobiernos de diferentes países están investigando la viabilidad de las monedas digitales de bancos centrales basadas en blockchain (CBDC), así como están proporcionando claridad reguladora a las criptodivisas existentes.