El renting de activos productivos es un recurso importante para las empresas colombianas que buscan mantenerse competitivas y ágiles en un mercado en evolución. Esta herramienta ofrece una serie de beneficios que van más allá de simplemente el arrendamiento de bienes, permitiendo una gestión fiscal más inteligente y eficiente. Con el renting, las organizaciones cambian sus estructuras de costos, liberan flujo de caja, evitan utilizar sus cupos de crédito con la banca y, al mismo tiempo, aprovechan incentivos fiscales que contribuyen a una mayor rentabilidad”, expresó Carlos López, director financiero de Alivo Renting para Colombia, Ecuador y Perú.

“Los impuestos sobre la renta tienen un impacto determinante en las decisiones de inversión, pero también hay otros factores relevantes como la apertura comercial y el crecimiento económico”, agregó López; esto sugiere que el renting es una opción que permite contar con los activos que las empresas requieren, siendo atractiva más allá de sus beneficios tributarios.

Lo anterior, teniendo en cuenta que el renting se adapta a las necesidades del perfil de cada compañía, ofreciendo alternativas que abarcan o excluyen el mantenimiento de los activos productivos dentro de la tarifa. Al mismo tiempo, la figura tiene relevantes ventajas tributarias, como la deducibilidad del canon de arrendamiento del impuesto de renta, lo que representa ahorros significativos para las empresas; por otro lado, permite descontar el IVA y contribuye a que las empresas no asuman la pérdida del valor de sus activos, a través de la depreciación.

De igual manera, entre sus beneficios, se destaca que no afecta la capacidad de endeudamiento, los vehículos y activos no se registran como activos propios, lo que proporciona mayor flexibilidad financiera y evita aumentar el pasivo de la organización.

De acuerdo con cifras de la compañía, las empresas pueden lograr ahorros de alrededor del 9% al optar por el renting en lugar de la compra, este ahorro se debe a la eliminación de costos de gestión y mantenimiento, así como a las ventajas fiscales mencionadas.

Otros beneficios son:

Actualización tecnológica:  Las compañías se mantienen al día con las últimas tecnologías sin incurrir en grandes gastos de capital. Al renovar los equipos periódicamente a través del renting, se optimiza la productividad y se evita la obsolescencia tecnológica.

Estabilidad en pagos: Las tarifas de renting son fijas y predecibles, lo que facilita la planeación y el control sobre sus finanzas y flujo de caja.

Eliminación de activos en el balance: En términos contables, los bienes adquiridos a través del renting no se registran como activos en el balance. Esto mejora ciertos indicadores financieros, como el retorno sobre activos (ROA) y la relación deuda-capital.