En un país donde el café marca el ritmo de nuestras mañanas, su valor va más allá de ser una fuente de energía. La evidencia científica actual lo señala como un importante protector cardiovascular.

La Clínica del Country y Clínica La Colina, comprometidas con el mensaje de que “Escuchar tu corazón es llenarlo de vida”, derriban viejos mitos y confirman que el consumo moderado de café es un hábito beneficioso para la salud cardiovascular de los colombianos.

Contrario a la creencia popular que por años ha vinculado al café con posibles riesgos, múltiples estudios a gran escala han comenzado a desmitificar esta idea. Investigaciones publicadas en prestigiosas revistas científicas indican que, consumido de manera adecuada, el café no solo es seguro para la mayoría de las personas, sino que podría jugar un rol protector contra diversas afecciones cardiovasculares.

Al respecto, el Dr. Giovanni de La Cruz, jefe del Servicio de Medicina Cardiovascular de la Clínica del Country y Clínica La Colina, comenta: “Durante décadas, la recomendación estándar era limitar el café por una supuesta asociación con arritmias o hipertensión. Hoy, la evidencia científica de alta calidad nos muestra una realidad diferente: el consumo regular y moderado de café no solo es seguro, sino que se asocia consistentemente con una menor incidencia de eventos cardiovasculares mayores. Estamos pasando del mito a la medicina basada en evidencia”.

La ciencia detrás de los beneficios: más que cafeína

Los efectos positivos del café en el sistema cardiovascular no se atribuyen únicamente a la cafeína. Esta bebida es una compleja mezcla de más de mil compuestos bioactivos, incluyendo una gran cantidad de antioxidantes y

polifenoles, como el ácido clorogénico. Estos componentes han demostrado tener propiedades antiinflamatorias y de mejora de la función endotelial (la salud de las paredes de los vasos sanguíneos), factores clave en la prevención de enfermedades del corazón.

Puntos clave para la salud cardiovascular:

  • Menor riesgo de enfermedad cardiovascular: Múltiples meta-análisis de estudios prospectivos han concluido que un consumo moderado de café, generalmente definido entre 3 y 5 tazas al día, se asocia con un menor riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, incluyendo enfermedad coronaria e infartos (1).
  • Reducción de la mortalidad: La evidencia científica es consistente al señalar que quienes toman café, en cantidades moderadas, presentan una menor tasa de mortalidad por todas las causas y específicamente por enfermedades cardiovasculares, en comparación con quienes no consumen café (2, 3).
  • Potencial efecto protector contra el ataque cerebrovascular (ACV): Investigaciones sugieren una relación inversa entre el consumo de café y el riesgo de sufrir un ACV. Los componentes del café podrían ayudar a prevenir la formación de coágulos y mejorar el flujo sanguíneo cerebral (2).
  • Beneficios en insuficiencia cardíaca: Estudios recientes han revelado que el consumo regular y moderado de café está asociado con un menor riesgo de desarrollar insuficiencia cardíaca a largo plazo (4).

El momento es clave: La ciencia del café matutino

Más allá de la cantidad, la evidencia reciente destaca que el momento del consumo es un factor determinante para maximizar los beneficios del café. Un importante estudio publicado en el European Heart Journal, que analizó a más de 40,000 adultos, reveló hallazgos contundentes:

  • Impacto directo en la mortalidad: Las personas que consumen café exclusivamente por la mañana mostraron una reducción del 31% en el riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular y del 16% por cualquier otra causa, en comparación con quienes lo toman durante todo el día o no lo consumen.
  • El secreto está en el ritmo biológico: La explicación científica apunta a que consumir café en la tarde o noche puede alterar nuestro reloj biológico interno (ritmo circadiano) y la producción de melatonina, la hormona del sueño. Esta interrupción afecta negativamente factores como la presión arterial y la inflamación. El café matutino, en cambio, actúa en sintonía con la activación natural del cuerpo.

Más allá de la taza: la clave está en la moderación y preparación

“Es fundamental que el público general reciba información clara y basada en evidencia”, añade el Dr. de La Cruz. “El mensaje clave es la moderación y la preparación. Los beneficios se observan principalmente con el café negro o con mínimas adiciones, evitando las bebidas de café ultraprocesadas, ricas en azúcares añadidos y grasas. Además, es crucial que los pacientes con condiciones preexistentes, como hipertensión no controlada, arritmias complejas o sensibilidad a la cafeína, consulten siempre a su médico. No se trata de una ‘receta’ universal, sino de integrar un hábito placentero dentro de un estilo de vida saludable y personalizado”.

La Clínica del Country y Clínica La Colina reafirman su compromiso con la educación en salud, promoviendo hábitos de vida que, respaldados por la ciencia, contribuyan al bienestar integral de los colombianos.

Bibliografía

  1. Ding, M., Bhupathiraju, S. N., Satija, A., van Dam, R. M., & Hu, F. B. (2014). Long-term coffee consumption and risk of cardiovascular disease: a systematic review and a dose-response meta-analysis of prospective cohort studies. Circulation, 129(6), 643–659.
  2. Poole, R., Kennedy, O. J., Roderick, P., Fallowfield, J. A., Hayes, P. C., & Parkes, J. (2017). Coffee consumption and health: umbrella review of meta-analyses of multiple health outcomes. BMJ (Clinical research ed.), 359, j5024.
  3. Kim, Y., Je, Y., & Giovannucci, E. (2019). Coffee consumption and all-cause and cause-specific mortality: a meta-analysis of prospective cohort studies. European journal of epidemiology, 34(8), 731–752.
  4. Stevens, L. M., L., H., & G. M., M. (2021). Association Between Coffee Intake and Incident Heart Failure Risk: A Machine Learning Analysis of the FHS, ARIC, and CHS Cohorts. Circulation: Heart Failure, 14(2), e006799.